Por Mariana Pérez, Gerente de Nuevos Negocios y Account Management Sabre

Bien se dice que hasta que no experimentas la maternidad no puedes hablar al respecto, ahora que decidí convertirme en mamá, nunca imaginé que esta transición hacia ello, fuera un proceso altamente complejo en el que tanto tu cuerpo como tu mente deben afrontar retos y situaciones totalmente desconocidas e inciertas.

No menos importante, pensar en la convivencia entre trabajo y maternidad que resulta un tanto estresante, incluso puede parecer imposible. Ahora bien, les aseguro, sin duda, que lejos de entorpecer, ayuda de varias formas en muchas circunstancias laborales.

Ser mamá implica desarrollar una gran cantidad de soft skills. Tal vez no estaban ahí antes, pero, si ya formaban parte de nuestro perfil, se vuelven ahora más firmes, como si alcanzarán un nuevo nivel.

Hace no muchos años y bajo un esquema de configuración familiar tradicional, muchas mujeres madres se veían confrontadas a renunciar a su actividad profesional y/o laboral por el solo hecho de asumir la crianza de sus hijos. Por otro lado, quienes elegían salir a trabajar y dejar a sus hijos al cuidado de otra persona percibían generalmente una remuneración mucho más baja que la que recibían muchos hombres, desalentando el crecimiento profesional de la mujer.

En el mundo laboral la maternidad resulta desde todo punto de vista inconciliable con el desarrollo. Según algunos estudios, casi el 85 % de las mujeres tiene la firme convicción de que la maternidad es un obstáculo para el desarrollo profesional.

Frente a este escenario, surge la pregunta relativa a la concepción social de la madre: ¿somos efectivamente las mujeres quienes consideramos incompatible el ámbito laboral y la maternidad o se trata de una más, entre tantas imposiciones, a las que nos hemos visto sujetas a lo largo de la historia? Yo digo que sí, muchas veces.

Desde que llegan, nuestros hijos nos transforman claro, rutinas, hábitos, pero adaptarse a todo esto moldea también personalidad.

Optimización de los tiempos, creatividad, gestión, negociación, resolución de conflictos: son sólo algunas de las herramientas indispensables para la enorme tarea de ser madre, que tienen grandes implicancias en nuestros puestos de trabajo.

Comprender este poder que adquirimos es fundamental para que no sea un peso ni un obstáculo en nuestra carrera.

Para ello, es necesario encontrar un lugar donde se respeten tiempos y espacios, no se juzgue o de antemano se considere que un hijo es un impedimento para el buen desempeño laboral, brindando la oportunidad de desarrollarse.

Tengo la suerte de haberlo encontrado en Sabre, empresa que además de ser líder en la Industria de Viajes, cuenta con políticas corporativas y directivos que apoyan y aseguran un acompañamiento más flexible en la maternidad. Y no solo a las madres sino también incluye una política para padres en donde tiene una licencia para acompañar a sus parejas durante los primeros meses de vida del bebe.

Cabe resaltar que a veces los beneficios no son suficientes si no van de la mano de una cultura sólida y consolidada de compañía. “Estos tienen que ser parte de un combo, y no pueden dejarse exclusivamente para las políticas corporativas. Es ahí donde entra en juego la cultura y la mentalidad de los líderes. Es muy importante que el responsable del área predique y sea consecuente”.

En la industria turística el 54 % de los puestos son ocupados por mujeres, así que este sector, debe de estar a la cabeza en desarrollar una cultura empresarial que apoye la maternidad de las mujeres como parte esencial para mantener un lugar de trabajo diverso e inclusivo a largo plazo, ya que si bien las mujeres podemos retrasar la maternidad, sigue siendo más probable que seamos madres en algún momento de nuestras vidas.

Sea cual sea el puesto que ocupemos dentro de una empresa, fomentemos el respeto, la flexibilidad y las oportunidades para las mujeres. Sólo así lograremos que la maternidad y el trabajo sean compatibles para todas.

Mariana Pérez Ponce de León

Es un gran poder femenino del sector.

Gerente de Nuevos Negocios y Account Management para Sabre, empresa líder en Tecnología para la Industria de Viajes y es presidente nacional de la Asociación Femenil de Ejecutivas de Empresas Turísticas, A.C.

Es licenciada en Relaciones Internacionales, egresada de la UNAM. Cuenta con un Máster en Mercadotecnia otorgado por la UVM. Así como diversos Diplomados en Proyect Manager con certificación.