Para fomentar los viajes trasatlánticos, Delta Air Lines, el Aeroporti di Roma y el Aeropuerto Internacional Hartsfield-Jackson de Atlanta se han unido a un programa de pruebas COVID-19, el cual permitirá a los pasajeros que vuelen con esta aerolínea entrar a Italia sin la necesidad de realizar cuarentenas.

Es importante mencionar que sólo aplica en estadounidenses autorizados para ingresar a territorio italiano por motivos esenciales, como trabajo, salud y educación, y en todos los ciudadanos europeos.

“Los protocolos que incluyen test para diagnosticar coronavirus cuidadosamente diseñados son el mejor camino para reanudar operaciones de manera segura y sin confinamientos hasta que las vacunas estén implementadas”, dijo Steve Sear, presidente internacional y vicepresidente ejecutivo para Ventas Globales de Delta.

Para este proyecto, la aerolínea americana ha contratado a asesores expertos de Mayo Clinic, líder mundial en salud, para revisar y evaluar las medidas que serán necesarias.

“Cuando las acciones se combinan con múltiples capas de protección, como requisito de cubrebocas, el distanciamiento social adecuado y la limpieza, podemos predecir que el riesgo de infección por COVID-19 debería ser casi uno en 1 millón”, dijo Henry Ting, director de Valores de Mayo Clinic.

Esta acción comenzará a partir del 19 de diciembre. Se harán exámenes médicos a los clientes y la tripulación en vuelos recientemente relanzados desde el Aeropuerto Internacional Hartsfield-Jackson de Atlanta al Aeropuerto Internacional de Roma-Fiumicino.

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