Un informe realizado por la Escuela de Salud Pública T.H. Chan de Harvard, y que fue compartido por Delta Air Lines, menciona que el uso de cubrebocas en los aviones reduce a menos de 1 % el riesgo de contraer COVID-19 u otras enfermedades respiratorias dentro de una aeronave.

Además, «cuando se usa con otras medidas implementadas, como filtros HEPA y desinfección de las superficies, se logra una protección significativa”, afirma la investigación.

Se puso como ejemplo el caso de dos personas que dieron positivo a coronavirus, pero que portaron adecuadamente un tapabocas. Ambos hicieron un viaje de 15 horas con otros 350 pasajeros, de los cuales, ninguno resultó contagiado.

La investigación coincide con las acciones desplegadas por Delta Air Lines, que fue de las primeras compañías aéreas en tener este requerimiento como parte de su protocolo de sanidad.

«No cabe duda que es una de las formas más eficientes de mantenerse seguro en el aeropuerto y a bordo. Es por eso que decidimos solicitar su uso para cuidar a los clientes y empleados», dijo el director Ejecutivo de Experiencia al Cliente de Delta, Bill Lentsch.

La aerolínea cuenta con medidas muy específicas para prevenir los contagios de esta enfermedad. Y, según informa, más de 300 personas han sido vetadas de sus vuelos por no usar cubrebocas.

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