Así es, los destinos detour, como también se les conoce, se posicionan como los favoritos al momento de viajar, facilitan explorar en busca de experiencias auténticas, pero menos concurridas y ubicadas cerca de lugares populares.

Cifras de Expedia señalan que el 63 % de los viajeros planean visitar un destino detour (o desvío) en su próxima travesía. Apostar por estos sitios, no es nada complicado, al contrario, únicamente hay que optar por un lugar más pequeño, cercano a un destino principal, que ofrece atractivos espectaculares alejados de las multitudes y una mayor conexión con la vida local.

Destinos detour: explora sin el bullicio

Lo mejor es que podrás sacar partido y gozar de experiencias como visitas a viñedos, probar un suculento platillo o disfrutar de un concierto. Incluso, a un precio más bajo.

Próximas paradas

Te proponemos algunas de las opciones detour para tu próxima escapada:

Rotterdam, la hermana discreta en Holanda Meridional

El final de la primavera y el inicio del verano, son ideales para explorar esta ciudad. Reconstruida después de la Segunda Guerra Mundial, es un paraíso arquitectónico con iconos como: las Casas Cúbicas y la Blaaktoren, con forma de lápiz. Sube al Euroscoop para  obtener una vista impresionante desde el Euromast, una torre de 185 metros de altura con terraza y dos restaurantes.

Conoce de cerca su gastronomía en el Markthal, un mercado de alimentos cubierto situado en el barrio de Laurenskwartier, encontrarás pequeños restaurantes, quioscos, bares y hasta un supermercado.

Tip: puedes viajar en el Intercity Direct, tren de alta velocidad, te tomará 30 minutos llegar a Rotterdam, después de bajar del avión del Aeropuerto de Schiphol en Ámsterdam.

Lyon, para los amantes de la gastronomía francesa

Así es, se le conoce como la capital gastronómica de Francia, por su rica tradición culinaria. Seductoramente, impactará tu paladar, ya que está repleta de bouchons, que invitan a explorar la comida tradicional Lionesa. Prueba el famoso coq au vin, las quenelles y la tarta de praliné. No te pierdas de un pícnic en el Parc de la Tête d´Or.

Vive la ciudad desde una perspectiva diferente, a bordo de un Bateau-mouche, creado en este destino, te llevará a un recorrido por los ríos Saona y Ródano. Si eres amante del arte visita el Museo de Bellas Artes y la basílica Notre-Dame de Fourvière, situada en la cima de una colina.

Tip: escápate a la recóndita isla de Île Barbe, ubicada a 6 km al norte de Lyon, conectada por un puente colgante del siglo XIX. Posee un monasterio del siglo V y su pequeña abadía. Te encantará a pesar de que sólo la mitad de la isla está abierta al público.

Oporto, la roba corazones de Portugal

Discretamente enclavada a las orillas del río Duero, esta ciudad de Portugal, combina coloridos edificios históricos, vinos de primera clase y un ambiente relajado inigualable. En junio ofrece vibrantes festivales como el Serralves em Festa, de 50 horas ininterrumpidas, y la Festa de São João, la mayor celebración del destino en honor a San Juan Bautista.

En el verano, es ideal para refrescarse en la Praia de Matosinhos, con olas que permiten surfear. Para los amantes del vino lo ideal es visitarla en otoño, la época de la vendimia que invita a descubrir las bodegas del valle de Duero y presenciar la elaboración del vino.

Tip: disfruta de escenarios dignos de una postal. Sube a la cima de la Torre de dos Clérigos, que pone la ciudad a tus pies o admira la pintoresca escena de sus casas desde arriba, a bordo del teleférico de Gaia.

No lo pienses más, apuesta en tu próximo viaje por los destinos “detour”, para una excursión de un día o como viaje principal.