fbpx
TOP

Sigue a Drácula en estos lugares de Rumania

Comparte este contenido

cabeza-vpm-feb-2020

¿Ya viste la nueva serie de Netflix, “Drácula”? Si tu respuesta es sí, seguro esos lugares misteriosos y de bosques eternos te sorprendieron, así como los castillos gigantescos y, por supuesto, tenebrosos. Aquí te presentamos algunos destinos populares entre los fanáticos del “Príncipe de los Vampiros”.

Transilvania

Esta región, ubicada en Rumania, es sin duda la cuna de todas las leyendas correspondientes a Vlad Drácula Tepes, el príncipe valaco que defendió a capa y espada sus tierras. Se ubica a sólo dos horas de Bucarest, la capital del país. Se reconoce rápidamente por sus bosques abundantes, montañas, carreteras en las que por horas puede no pasar gente o auto alguno y un aura mística. Ojo, eso no quiere decir que sea una visita triste o aterradora. Al contrario, se trata de un espacio donde tú y la naturaleza pueden converger libremente.


Ver esta publicación en Instagram

Una publicación compartida por descope.ro (@descope.ro) el

Bucarest, la capital de Rumania

Siendo la capital del país valaco, se trata del punto de partida para seguir las pisadas de Drácula. A diferencia de Transilvania, es un destino más citadino, con hermosa arquitectura. Justamente aquí se encuentra el Museo Nacional de Historia, en el cual se expone el magno retrato del príncipe Vlad Tepes. Después de un encuentro cara a cara con él, puedes dirigirte al centro de la ciudad para apreciar palacios, iglesias y recintos con diseños dignos de cualquier cuento de hadas.

Brasov

Drácula tenía un cruel apodo: “El empalador”. En Brasov se dice que el príncipe torturó a todo aquel que le llevara la contraria. Sí, lo sabemos, suena aterrador, pero actualmente se trata de una de las paradas turísticas más populares para quienes visitan Rumania. Aquí podrás apreciar una verdadera villa barroca, con deliciosos restaurantes, acogedores hoteles y otras amenidades.


Ver esta publicación en Instagram

Una publicación compartida por Brasov (@brasov) el

Bran, “el castillo del Conde Drácula”

Aquí la leyenda se consumó. El mismo lugar donde, en el libro, se narraba cómo el conde Drácula vivía, mostrándose malvado y poderoso por las noches y durmiendo en su féretro durante el día.

Aunque no hay un hotel oficial, podrás hospedarte en alguno de los que se encuentran muy cerca. Por su localización, es posible ver osos y lobos, y por la noche, es muy común escuchar lamentos y gritos desde lo más profundo del castillo.

No faltan los locales que afirman que la leyenda vampírica es cierta, y que todo aquel que vaya debe andar con mucho cuidado.


Ver esta publicación en Instagram

Una publicación compartida por Travel Couple | Ally Paz (@ally__paz) el

Y tú, ¿estás listo para recolectar la historia de Drácula en Rumania? Por si las dudas… te sugerimos llevar ajo y estacas.


Comparte este contenido