Por Bibiana Saucedo

Ha construido una gran carrera dentro de la industria. A pesar de su juventud, ya es un líder que indudablemente inspira. Porque es un excelente profesional con pasión y compromiso. Y desde luego un ser humano maravilloso.

Es Mauricio González, CEO de Connect Worldwide México (CWW), a quien me fascina entrevistar, lo confieso. Por esa chispa y entusiasmo que siempre irradia.

Hoy de nueva cuenta, me permite entrar a su gran mundo para comentarme de sus planes, sueños y anhelos. Y en primera instancia, decirnos en qué momento se encuentra, “Tenemos la fortuna de decir que estamos en uno de los instantes más interesantes y positivos de nuestra historia. Han sido un par de años retadores, sin embargo de mucho crecimiento en todos los sentidos. Desafortunadamente como todos los colegas sufrimos descalabros y realizamos ajustes operativos, a pesar de ello logramos sobreponernos y ahora tenemos un equipo muy consolidado y en desarrollo tanto profesional como en número de colaboradores”.

A pesar de los tiempos difíciles, González encontró oportunidades con nuevos clientes, “Como toda crisis, siempre hay oportunidades y conseguimos materializar algunas. Así que en 2021 dos clientes nuevos se sumaron a nuestro portafolio y en este 2022 estamos trabajando para que dos o tres más sean parte de la familia”.

CWW es una súper empresa global que ofrece todo tipo de servicios, “Migramos de ser una compañía tradicional de representación a una hub creativo de negocios donde nos encargamos de conectar a los destinos, productos o servicios con clientes potenciales, nos enfocamos en cuatro grandes áreas: Digital, Marketing, Relaciones Públicas y Turismo”.

Exitoso y con personas incondicionales que diariamente le demuestran su apoyo, el líder de esta compañía nos informa de las importantes empresas que hoy representa: Alemania, Arizona, Costa Rica, Cross Border Express (CBX), Houston, Kissimmee, Malasia, Wyoming y el Sistema de Aeropuertos de Houston.

Pero, cuál ha sido la estrategia de la dirección que tú lideras durante los últimos meses. “Es simple y está en nuestra gente, mantener un equipo motivado, altamente eficiente y sobre todo creativo ha sido la base de nuestro éxito, sin olvidar que siempre hay que predicar con el ejemplo”.

Al hablar sobre el turismo después de esta pandemia y cuánto tiempo nos llevará adaptarnos a esta nueva normalidad, nos detalló, “El turismo esta experimentando un efecto champaña (cuando agitas una botella, la abres y salen las burbujas sin control), así lo estamos viviendo y a muchas empresas las está tomando por sorpresa porque venimos de un momento crítico donde tuvimos que reducir personal y tomar decisiones financieras, sin embargo la resistencia al cambio no te lleva a nada positivo, sino todo lo contrario. En la medida que aceptes el factor de cambio, identifiques oportunidades y te adaptes a los nuevos modelos, serás exitoso” Y agregó “El turismo no cambiará su esencia, pero sí la forma de viajar. Algunos con más conciencia, otros con preferencias diferentes y debemos estar preparados para leer esas nuevas maneras de viajar. En cuanto a adaptarnos, creo que ese proceso comenzó desde el día cero, el día en que supimos que nos teníamos que guardar y que había un bicho mortal suelto. Es un proceso dinámico que seguirá evolucionando. ¿Cuánto tiempo? No lo sé, creo que no terminará pronto y al menos los próximos cinco años serán de cambio-adaptación.

Asimismo, nos contó de sus planes para este 2022, “Como un buen amigo me lo dijo, ‘Embrace the impact and be open to the new era’. Nos hemos acoplado a trabajar de manera diferente, con una mejor planeación y ejecución de nuestros planes, pero esto no se puede lograr si no tienes un equipo que te respalde y sin duda, el que tengo hace que en gran medida, esto suceda.

Comentó que este será un año de re-consolidación de CWW, de sus clientes y de la industria. “Vienen cosas muy interesantes, sin embargo, no podemos perder de vista el escenario internacional en muchos sentidos, pandemia, guerra, migración y demás factores geopolíticos, socioeconómicos y de salud serán jugadores clave para el futuro de nuestro sector al corto y mediano plazo”.

CWW en México inició operaciones en 2004, es decir 18 años cumplidos, aunque la empresa se fundó en 2002 abriendo las oficinas de Japón, China y Reino Unido. Pero Mauricio González posee una larga historia en el turismo, “Comencé en 1998, estudié Administración Hotelera y después obtuve un Master, tuve la oportunidad de colaborar con grandes personalidades de la industria así como empresas en las cuales aprendí mucho: Disney, Sabre, Sheraton y algunas otras que me sirvieron como base para lo que hoy hacemos”.

A él le fascina indudablemente viajar pero quienes realmente lo conocen saben de su loca pasión por los aviones y las aventuras al aire libre. Su país favorito… “uff no tengo uno en especial son varios, Tailandia, Reino Unido y Egipto encabezan mi lista”, nos dice convencido. En cuanto a comida, definitivamente nos confiesa que la mexicana es su perdición, “sin embargo tengo debilidad también por la árabe y asiática”.

Nos revela que aún tiene diversos sueños por alcanzar en la vida… “¡Sí!, no sólo uno, son varios, pronto se enterarán, pero el primero y a corto plazo es mi licencia de piloto privado”.

Profesionalmente hablando, ¿qué representa para ti ser líder de una gran empresa como CWW, en donde has logrado ser respetado, admirado y querido?: “Significa una de mis grandes satisfacciones en la vida, antes de empezar con la compañía, siempre tuve el objetivo de independizarme antes de cumplir 30 años y aquí estamos… algunos años después. Es una industria muy gratificante, he encontrado grandes amigos que ahora tengo la fortuna de que sean parte de mi vida, inclusive algunos de ellos que sean mis socios en nuevas aventuras”.

Finalmente, Mauricio González con profunda sensibilidad y sencillez, envía a través de INVERTOUR un bello mensaje al sector… “Algo simple, déjense llevar por sus sueños y por su pasión, no tengan miedo al cambio. ¡Crear, intentar, equivocarse y volver a intentar es la fórmula! Como alguna vez dijo Thomas Alva Edison: ‘Nunca fracasé, solo descubrí 999 maneras de cómo no hacer una bombilla”.