Por sí solo, Quebec es un destino atractivo por naturaleza; y ni qué decir de sus cuatro regiones turísticas del este, que aunque son diferentes unas de las otras, se unen por algo en común: el mar.

Estas regiones albergan 10 parques nacionales que le dan un plus al destino, pues cuentan con acceso a los recursos naturales y culturales más bonitos de Quebec. Uno de ellos, diseñado por el mar, con un paisaje de acantilados, islas e islotes, es el Parque Nacional de Bic, que sin duda alguna te seducirá y en el que puedes pasar algunas noches en un camping, en tienda o en Huttopia.

El Parque Nacional de Gaspésie, por su parte, te ofrece excursiones a la montaña, alojamiento con todas las comodidades y cocina regional en el albergue le Gîte du Mont-Albert; y aquí abre los ojos, porque te puedes encontrar con caribúes, alces y más de 150 especies de aves.

También está el Parque Nacional Forillon, de una belleza impresionante, con sus acantilados abruptos, fauna, flora e historia íntimamente vinculada con la pesca del bacalao, que lo hacen que sea un lugar de descubrimientos extraordinarios. O el Parque Nacional de la Isla Bonaventure y la roca Percé, que alberga alrededor de 200 mil aves marinas, ¡entre ellas la colonia de alcatraces más accesible del mundo!

El Parque Nacional de Miguasha, patrimonio de la humanidad, constituye el yacimiento de fósiles más sorprendente del mundo, ¡con ejemplares que se remontan a unos 380 millones de años! Y los Parques Marino del Saguenay – San Lorenzo, el Fiordo del Saguenay, Anticosti, el Archipiélago de Mingan y Lago Temiscouata son bellezas que deben disfrutar tus propios ojos.