Quebec con vista que huele a mar
Vive los parques nacionales
¿Buscas una experiencia que te conecte con tu lado salvaje? Explora las montañas y bosques con vistas al mar o río que ofrecen los parques nacionales localizados en las regiones del este de Quebec, donde podrás practicar kayak, canoa, senderismo y hacer excursiones por tierra y por mar. Si bien la infraestructura te sorprenderá por su diversidad, desde hoteles pequeños y muy cómodos hasta cabañas a la orilla de lagos o áreas de campamento, te recomendamos contactar a un guía para explorar las entrañas del bosque, quienes te conducirán por veredas llenas de historia de la tierra y una celebración de la vida animal. Arma tu plan de acuerdo a tus gustos, tiempo y expectativas; el itinerario más recomendable es de 12 días para que vivas una experiencia inolvidable.
Observa los glaciares, anda en bicicleta de montaña o kayaquea para sentir la variedad de aves en el Parque Nacional Fjord-du-Saguenay. O sumérgete a la aventura 100 por ciento marítima en el Parque Nacional Marino Saguenay–St. Lawrence, no podrás aburrirte en sus 1,245 km2.
Llegar al Parque Nacional Anticosti es en sí una aventura: lo puedes hacer por barco desde las islas Sept o Rimouski o por aire desde distintos puntos de Quebec. En esta región, de apenas 300 personas, viven más de 166 mil venados de cola blanca, con los que podrás convivir en tus paseos diarios por sus acantilados, cañones y cuevas marinas. Pasa la noche junto al mar y hospédate en un faro. No te arrepentirás.
La Reserva Parque Nacional Archipiélago de Mingan te ofrece una aventura de largo aliento y única en la vida, ya que te invita a recorrer 30 islas de piedra caliza y más de mil islotes y arrecifes graníticos. Goza de una caminata por las islas de Niapiskau o la Nue de Mingan, o déjate guiar por las maravillas naturales de este parque en donde verás una variedad de flora y fauna tan sorprendente como la historia geológica de la zona. Bucea las aguas del archipiélago o explóralas por kayak y pasa una noche en una tienda de campaña en una isla para ver el cielo nocturno del norte del planeta.