Si eres fanático de los videojuegos, o quieres cumplir el deseo de un pequeñín para este próximo Día del Niño, no puedes perderte la oportunidad de hospedarte en el Hotel Marufukuro, el cual está ubicado ni más ni menos que en la antigua sede original de Nintendo, en Kioto, Japón. 

En esta antigua oficina se fabricaban juegos de cartas, el primer giro del apodado “Disney japonés”. Y desde el 1º de abril de este año, sus adentros operan como un lujoso hotel, conservado muchos elementos originales para lograr una fusión entre lo tradicional y lo moderno de la cultura nipona.

Entre los detalles que encontrarás en el Hotel Marufukuro, hay ciertos detalles originales que han sido conservados para homenajear a la Nintendo de aquellos tiempos, como los baños al aire libre, que aportan un ambiente señorial de antaño y un toque moderno. Asimismo, cuenta con una biblioteca que encarna la historia y la cultura de la empresa, según la interpretación de la familia Yamauchi, fundadora de este imperio de los videojuegos; y un salón en el cual los huéspedes pueden relajarse y desconectarse para disfrutar de la experiencia en el Hotel Marufukuro.

Y quienes sean foodies de corazón, descubrirán que «Carta», el restaurante del hotel, es supervisado por el chef Ai Hosokawa, y ofrece a sus huéspedes comidas y bebidas especiales todo el día, inspirados en la gastronomía tradicional con toques que recuerdan a la diversión de los juegos de videos. Este sitio, conformado por tres edificios, tiene en sus paredes las primeras cartas de juego (hanafuda) producidas por Fusajiro Yamauchi -fundador y primer presidente de Nintendo-, que en ese entonces se llamaba Nintendo Koppai. Incluso, en el exterior hay una placa de derecha a izquierda -como solía escribirse en Japón antes- donde se lee «Nintendo Yamauchi», junto con una lista de todas las tarjetas que la empresa produjo en su momento.Los amantes de los videojuegos no pueden dejar de ir a este hotel y aprovechar para conocer la antigua capital tradicional de Kioto, que más allá de la ciudad, la prefectura de Kioto esconde innumerables tesoros rurales también, que harán que sus visitantes vivan una experiencia de otra época.