Grecia ha confirmado que, a partir del 14 de mayo, abrirá sus puertas a los visitantes internacionales que cuenten con vacunas contra el COVID-19, tengan anticuerpos (es decir, ya hayan padecido esta enfermedad y estén totalmente recuperados) y a quienes presenten una prueba negativa.

Se trata de una fuerte iniciativa que busca reactivar el turismo, una de las principales entradas monetarias de esta nación, la cual representa entre el 25 % y el 30 % del producto interior bruto (PIB).

Según el ministro de Turismo griego, Jaris Theojaris, adicionalmente, se les realizarán test para diagnosticar coronavirus a los turistas de forma aleatoria en aeropuertos, puertos marítimos o cualquier entrada al territorio.

Adicionalmente, señaló que si es oportuno, se lanzará un programa piloto en el cual se aceptarán a ciudadanos de la Unión Europea y de países donde la campaña de vacunación haya protegido a un porcentaje importante de su población, todo bajo los lineamientos antes mencionados.

También puede interesarte…

Israel abre, parcialmente, sus fronteras