El amor está en el aire, y qué mejor forma de celebrar el Día de San Valentín que en la romántica San Agustín. Una ciudad de Florida que inspira añoranza a las parejas, contando con una gran oferta que podrás disfrutar con esa persona súper especial.

Si quieres conocer el lado más clásico de este destino, debes reservar en un Bed & Breakfast. Te recomendamos St. Francis, un coqueto hostal cuyas raíces se remontan a 1791, año en el que abrió sus puertas siendo parte de una colonia española, por lo cual su arquitectura es muy clásica. Por la noche, algunos huéspedes aseguran haber visto el triste fantasma de Lily, quien a mediados del siglo XIX trabajaba en la gran mansión. La leyenda cuenta que su melancolía es por un frustrado amor con su patrón, a quién se le prohibió verla debido a sus clases.

Otro obligado es el Castillo de San Marcos, que edificado entre 1672 y 1695 fue testigo mudo de innumerables batallas. Estuvo bajo control militar hasta 1933. Cuentan los encargados que es normal sentir brisas frescas repentinas acompañadas de un suave perfume femenino que recuerda a ciertas historias pasionales de antiguos tiempos.

Pasear por las calles coloniales de San Agustín es inolvidable. De la mano de tu pareja atrévanse a escuchar los fantásticos relatos de sus alrededores. La impactante vista que se aprecia desde lo alto del faro de San Agustín y Museo Marítimo, uno de los lugares más populares de la zona para proponer matrimonio, es aún más espectacular y misteriosa por las noches.

No olvides visitar el árbol del amor en la calle Córdova de San Agustín. ¿Cómo podrás reconocerlo? Simple, se trata de dos árboles enroscados a modo de abrazo eterno. Besarse frente a tan caprichoso cuerpo es de buena fortuna para la pareja.