
Inteligencia artificial: cómo transforma la forma en que viajamos
La inteligencia artificial dejó de ser un concepto del futuro para convertirse en una herramienta práctica dentro de los viajes. Según el informe global de Booking.com, basado en más de 37 mil consumidores de 33 mercados, la IA ya es parte de la planeación, la experiencia y hasta el regreso de las vacaciones.
Inteligencia artificial en la experiencia de viaje
En México, el 74 % de los viajeros afirmó haber usado alguna herramienta de inteligencia artificial durante su viaje. Esto muestra que la tecnología no solo facilita procesos, sino que también personaliza la experiencia.
Un 39 % la utilizó para recibir recomendaciones de restaurantes, mientras que el 37 % la empleó para orientarse en ciudades desconocidas o moverse en sistemas de transporte. La investigación también señala que el 41 % recurrió a la IA para investigar destinos y elegir el mejor momento para visitarlos, mientras que el 45 % solicitó sugerencias de actividades durante su estancia.
El impacto va más allá de la planeación. Durante el viaje, un 40 % la usó como traductor y, al regresar, un 44 % reconoció que la aplicó para editar fotos. Estos datos reflejan que la IA acompaña al viajero en todas las etapas.
IA y turismo responsable
Un hallazgo relevante es el interés de los mexicanos en que la tecnología apoye al turismo responsable. Un 71 % expresó que desea recibir sugerencias de experiencias que beneficien a comunidades locales. Esto muestra una creciente conciencia sobre el impacto social de los viajes.
Expectativas hacia el futuro
Para James Waters, director comercial de Booking.com, la IA generativa representa uno de los cambios tecnológicos más significativos de nuestra era. Esta transformación impacta tanto en la forma en que las empresas anticipan necesidades de los clientes, como en las expectativas de los propios viajeros, quienes esperan cada vez más interacciones útiles y personalizadas.
La conclusión es clara: la inteligencia artificial no solo se posiciona como un asistente práctico en cada etapa de un viaje, sino como una herramienta que redefine el turismo hacia un modelo más eficiente, personalizado y consciente.