Si bien algunos países han comenzado a abrir sus fronteras a viajeros de lugares selectos, otros optaron por diseñar corredores sanitarios, los cuales actuarán como una “burbuja”, que incluyen territorios que controlaron la cantidad de contagios de COVID-19 entre sus ciudadanos.

Un importante número de naciones en el Sureste de Asia y partes de Oceanía se unieron a esta iniciativa, la cual busca que sólo ciertas nacionalidades puedan desplazarse libremente sin necesidad de hacer cuarentenas.

De hecho, hace un mes, China y Singapore estrenaron esta “burbuja” entre ambos tras mantener a línea los casos de coronavirus con el objetivo de reiniciar la actividad económica.

Para poder ser parte de un corredor, el país debería tener igual o menor número de contagios que los otros miembros, para minimizar el riesgo. Esta apuesta sería sumamente positiva durante la temporada de verano, ya que permitiría disfrutar de las vacaciones y generar intercambio de divisas.

La propuesta ha sido apoyada por autoridades, especialistas en el tema, la Organización Mundial de Viajes y el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC). Sin embargo, por ahora, excluye de casi todo el mundo a países del continente americano.

“Este sistema entre zonas o países de bajo riesgo de COVID-19 también ayudará a limitar los requisitos de entrada y reforzará los esfuerzos de los gobiernos y empresas privadas que trabajan en colaboración para despertar al sector”, mencionó al respecto Gloria Guevara, presidenta y CEO del WTTC.

¿Y México?

Otro ejemplo es lo logrado por diversos estados mexicanos como Yucatán, Quintana Roo y Campeche, que al ser reconocidos con el Sello de Viaje Seguro (Safe Travels Stamp) que otorga el consejo antes mencionado, aseguran que operan con los más altos estándares para prevenir la propagación de esta enfermedad.