Después de años de larga espera, por fin comenzó a operar el nuevo Aeropuerto Internacional de Berlín (BER), permitiendo a la capital de Alemania tener un aeródromo que cumple con toda la normatividad internacional para trabajar con seguridad.

Su construcción inició en 2006. Originalmente, estaba planeado que comenzaría a recibir vuelos en 2010. Sin embargo, la fecha se fue postergando más y más para rediseñar algunas áreas y a beneficio de aerolíneas, usuarios y negocios, para que así puedan laborar con espacios óptimos y bien comunicados.

Según la agencia AF, el valor de la obra está estimada en €6 mil 500 millones de euros (aproximadamente $7 mil 572 millones de dólares).

El Aeropuerto de Berlín-Tegel, que servía anteriormente a la capital, cerró oficialmente el 8 de noviembre, permitiendo el aterrizaje de un vuelo de Air France desde París.

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