República Checa es un país con una vasta oferta turística. Esta vez, te presentamos las emblemáticas regiones de Moravia del Norte y Silesia, las cuales son conocidas por su historia relacionada con la minería. Después de que las fábricas relacionadas cerraron, se convirtió en un destino muy particular. Aquí te presentamos algunas atracciones que no te puedes perder.

Es importante mencionar que ahí encontrarás edificaciones cuyas formas y colores contrarrestan con los bosques y prados de Jeseníky y Bedkydy. Así como algunas adorables casitas de madera construidas en los siglos XVIII y XIX.

Esta zona se encuentra a 370 km de Praga, a 170 km de Cracovia y a 290 km de Bratislava. Es ideal por su arquitectura industrial, urbana y popular, así como por sus campos de golf, para esquí, ciclismo, senderismo, y ¡mucho más!

Tradición industrial y minera

Ostrava, la ciudad monumental de acero, donde apreciarás torres, hornos y chimeneas altísimas, así como Vítkovické železárny, un complejo industrial. Además ¿sabías que aquí hay una ciudad subterránea? Otra parada obligatoria es Landek Park, el cual ofrece un museo dedicado a la extracción de minerales, en el que conocerás más sobre la vida de quienes se dedican a esta ardua tarea, incluso, los espacios donde laboraban se han conservado de forma que pareciera que los mineros acaban de terminar su turno.

Arquitectura popular

Descubre hermosas laderas verdes, construcciones de madera, tradiciones populares y la excelente gastronomía regional en Valaquia (Valašsko en checo) y las montañas Beskydy. Visita Štramberk, donde están las ruinas del castillo Strallenberg, el cual, aunque antiguo, brilla por su torre alta cilíndrica llamada Štramberská Trúba, con un puente de madera.

Si te encuentras en esta ciudad, no olvides degustar las “orejitas”, las cuales son panes dulces hechos de masa con miel y especias y que al ser amasados, toman esta forma.

Conoce más de Sigmund Freud 

Příbor es la ciudad natal del padre del psicoanálisis. Se trata de un lugar ubicado al pie de las montañas Beskydy. Entra a la que fue su casa y que ahora es un museo que te llevará a conocer el lugar en el que creció.