La industria aérea enfrenta un panorama complicado para 2025 debido a los problemas persistentes por la crisis de suministros. Según la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA), estas disrupciones están elevando los costos, limitando el crecimiento y afectando el desempeño ambiental de las aerolíneas, quienes dependen de una modernización constante de sus flotas.

Principales retos para las aerolíneas

IATA reporta que la edad promedio de las flotas mundiales alcanzó un récord de 14.8 años, reflejo del rezago en las entregas de nuevas aeronaves. En 2024, se espera la entrega de 1 mil 254 aviones, cifra muy inferior a las 1 mil 813 entregas de 2018. Aunque para 2025 se proyecta una leve recuperación con 1 mil 802 unidades, este número sigue lejos de las necesidades actuales del mercado, donde la demanda supera ampliamente la oferta.

La crisis también ha llevado a un aumento en el número de aeronaves estacionadas. Un 14 % de la flota global permanece fuera de servicio, con aproximadamente 700 aviones detenidos por inspecciones técnicas, lo que refleja la incapacidad de los fabricantes para satisfacer las necesidades del sector.

Impacto en costos y sostenibilidad

El envejecimiento de las flotas está generando costos de mantenimiento más altos y un consumo de combustible menos eficiente. Esto, sumado a un incremento del 20-30 % en las tasas de arrendamiento de aeronaves, complica los esfuerzos de las aerolíneas para recuperarse económicamente tras la pandemia y alcanzar sus metas de sostenibilidad, como la neutralidad de carbono para 2050.

Willie Walsh, director general de IATA, mencionó: “Los problemas en las cadenas de suministros frustran a todas las aerolíneas, que ven sus ingresos comprometidos, se exponen a costes más elevados y a un peor desempeño medioambiental. Los factores de ocupación están en máximos históricos, y no cabe duda de que si tuviéramos más aviones, estos se podrían utilizar de una forma más rentable. Además el envejecimiento de las flotas genera unos costes de mantenimiento más elevados, consume más combustible y en general exige más recursos financieros para seguir volando”.

Un llamado a los fabricantes

El sector de la aviación está unido en su compromiso por un futuro más sostenible, pero las soluciones requieren una mayor coordinación entre aerolíneas y fabricantes. Resolver la crisis en las cadenas de suministro es clave para garantizar que la industria aérea pueda responder a la creciente demanda, operar de manera eficiente y continuar avanzando hacia un transporte más responsable con el planeta.