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Viajes Fama y LATAM Airlines te invitan a descubrir una cultura fascinante: los Chachapoyas

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Joyas arqueológicas del Perú
(Primera parte)

Por Bibiana Saucedo

Chachapoyas, Perú.- Una cultura increíble y sorprendente. Hace muy poco abrieron los accesos… Todo un reto llegar hasta aquí. Si eres amante de la historia, cultura prehispánica, paisajes sublimes y todo un aventurero… ¡esto es para ti!

Viajes Fama y LATAM Airlines logran llevar al primer grupo de operadores mexicanos, y a INVERTOUR como único medio invitado, hacia estas latitudes… fue una experiencia sensorial apoteósica… Qué orgullo haberlo logrado!!!

Tras un día placentero visitando la bella Lima, capital del Perú, al día siguiente tomamos el estupendo y cómodo vuelo de LATAM Airlines 2298 con una hora de duración desde Lima a la ciudad de Jaén, que posee un aeropuerto rústico y chiquito pero encantador…

Ya nos esperaba «Chachapoyas Premium Service» claro de Viajes Pacífico, la mejor operadora de servicios terrestres en el Perú. Es necesario comer en el pueblo de Jaén porque son cuatro horas de viaje por caminos intrincados y sinuosas curvas, pero con paisajes increíbles para llegar a Chachapoyas…

El bellísimo Hotel Casa Hacienda Achamaqui que dirige Jorge Lazo, gerente general, nos recibe en medio de la nada: rústico y acogedor, con vegetación exuberante y alrededores espectaculares. Este fue nuestro refugio por algunos días… y fue exquisito comer delicias peruanas aquí, deleitarnos en la piscina, disfrutar de una noche de fogata y gozar de un masaje holístico en su spa, tras días de agotadoras, créanme, agotadoras caminatas.

Y al fin llegó el día de conocer el reino de los Chachapoyas. Pues bien, nuestra expectación crecía. Escuché decir muchas cosas al respecto, conocer el lugar que quizá pueda competir con Machu Picchu o que su turismo está creciendo a pasos agigantados. Hasta nuestra aguerrida anfitriona, Vicky Jiménez de Viajes Fama, nos dijo que había esperado 20 años de su vida para este momento.

Salimos muy temprano del hotel. El transporte de Vipac puntual estaba ahí con Roger, nuestro simpático y profesional guía, cuyo nombre se pronuncia con «j»… pero se escribe con «g», ¡Roger!

Una hora hicimos para llegar al distrito de Tingo donde tomaríamos otro autobús, propiedad del gobierno y el cual nos llevó a abordar el increíble Teleférico de Kuélap, construido estratégicamente por franceses, inaugurado el 2 de marzo de 2017. Se dice que transportó un aproximado de 2 mil turistas en sus primeros cinco días… Cruza a 60 metros sobre el río Tingo y cubre una distancia total de cuatro kilómetros, que serán recorridos en aproximadamente 20 minutos, con una capacidad de ocho pasajeros por Telecabina… Sube y sube mientras vislumbras paisajes de ensueño.

Una vez arriba… se DEBE caminar más de una hora por intrincadas pendientes, o si lo prefieres, puedes hacerlo montando un caballo… preferí caminar. Definitivamente es toda una parafernalia llegar hasta aquí.

El reino de los Chachapoyas es ESPECTACULAR!!!
La fortaleza increíble de esta cultura se yergue majestuosa, poderosa e impactante… Está cimentado en una zona de paisajes conmovedores que conjugan las alturas de los Andes y la selva amazónica, lo que crea un espectáculo indescriptible.

Kuélap fue construido y habitado por los Chachapoyas (1000 a 1400 años d.C.), su nombre derivaba de los vocablos Sacha que quiere decir «bosque», y phuyu, «nube»; lo que deriva como «Bosque o gente de las nubes», término otorgado por los incas que los nombraban «gente o salvajes de las nubes» por la extraordinaria altura donde hicieron sus construcciones. Además –cuenta Roger– estos nunca se dejaron conquistar por los incas. Esta cultura nació desde el siglo V d.C. aún cuando los incas no existían.

Mucho tiempo después, los españoles que llegaron no pronunciaban bien el nombre y éste se fue deformando hasta decirles «Chachapoyas». Ellos no eran conquistadores, ni sangrientos, sólo querían vivir en paz y en las alturas.

Su enorme fortaleza o muralla se ubica en la parte alta del valle del río Utcubamba, próximo al caserío de Kuélap en el distrito de Tingo, Provincia de Luya, Departamento de Amazonas (Perú) a 3 mil m.s.n.m. Una ciudad fortificada y construida de piedra y considerada la más grande de Sudamérica, con siete hectáreas de construcción (Machu Picchu tiene cuatro hectáreas). Se dice que el motivo por el cual construyeron su hábitat en montañas altas era más bien religioso y político, imponer poder y respeto.
En 1532, el español Diego de Alvarado, luego de conquistar a los incas, movió a todos los pobladores de este sitio y alrededores a una nueva ciudad. Y conquistó también a los Chachapoyas.

Esta ciudad quedó en el olvido para la mayoría de la gente, hasta el año de 1843 cuando don Juan Crisóstomo Nieto, juez en la ciudad de Chachapoyas, fue llevado a este sitio y quedó tan impresionado que escribió un informe titulado «Torre de Babel en el Perú» para la Sociedad Geográfica de Lima, que años más tarde lo publicó en su boletín.

Kuélap está formada por dos gigantescas plataformas artificiales superpuestas, sobre las cuales se levantó una urbe MARAVILLOSA, sus casas eran redondas y techos de paja (tipo palapas). Con un epicentro ceremonial, manejado por niveles: pobres, ricos, sacerdotes… Nadie se explica cómo lograron subir las enormes piedras hacia esta inmensidad de montaña, y también es inexplicable cómo sobrevivieron si no llegaba hasta aquí el agua… Sólo la recolectaban de la lluvia.

Se dice que esta cultura era altamente inteligente y físicamente eran hermosos: altos, delgados, rubios y de ojos verdes. Por ello, se cuentan diversas historias, una de ellas es que en estas latitudes habitaban los nómadas nórdicos, los vikingos de quienes los Chachapoyas son descendientes. Otra versión de los pobladores va más allá… que ovnis andaban rondando estas sublimes montañas. Nadie sabe, lo único cierto es que esta fortaleza es más que increíble…

Siguiendo las huellas de los Chachapoyas… Los Sarcófagos de Karajía son sorprendentes
Luya, Departamento de Amazonas, Perú.- La cultura prehispánica de los Chachapoyas no ha dejado de sorprendernos en este fascinante recorrido de Viajes Fama… Salimos como siempre muy temprano, y luego de dos horas llegamos a Luya del Departamento de Amazonas, desde aquí fuimos en busca de algo increíble… Caminamos por pendientes atrevidas y bravas, mientras vislumbrábamos paisajes ESPECTACULARES, barrancos increíbles, despeñaderos y cauces… al fin los descubrimos… Y aunque fascinantes son escalofriantes.

Los Sarcófagos de Karajía fueron descubiertos en 1985 por el arqueólogo peruano Federico Kauffmann Doig. Un conjunto de sarcófagos o ataúdes según la tradición funeraria de los chachapoyas, de hasta 2.5 metros de alto con formas humanas, fueron encontrados en el barranco de Karajía, sobre los 3 mil 100 metros de altitud (aún más alto que la fortaleza de Kuélap).

De acuerdo a Roger, los cementerios siempre se localizan en grandes alturas, abismos, y parte de su tradición era dejarlos en este tipo de acantilados, «justamente esa inaccesibilidad es lo que ha permitido que no los saqueen ni destruyan los depredadores», nos dijo. En este lugar son sólo seis sarcófagos con un ÚNICO estilo de diseño en el mundo. Aunque por toda el área de Chachapoyas se pueden localizar más de cinco mil sarcófagos, pero difíciles de ver y acceder.

En Karajía-1 en realidad había siete sarcófagos. El tercero se derrumbó probablemente durante el sismo de 1928, desapareciendo en el despeñadero. Estos se encuentran lateralmente unidos unos a otros, el que se desplomó se abrió en los costados de los contiguos. Ello permitió reconocer en detalle el contenido de estos sarcófagos y determinar el de los restantes; de esta manera no tuvieron que ser violentados, motivo por el cual permanecen intactos.

En el interior del sarcófago abierto se encontraba una momia sentada y envuelta en telas mortuorias. Objetos de cerámica y ofrendas diversas acompañaban al muerto. Es así como los sarcófagos de los chachapoyas estaban conformados por una especie de gran estuche construido con tierra arcillosa mezclada con piedras pequeñas, madera y paja brava o ichu. Éste ofrece el espacio necesario para tapar al fiambre momificado, en posición fetal y arropado con tejidos, no con joyas como los incas u otras culturas. Tanto cuerpo como cabeza están decorados con pintura roja de dos tonos, aplicada sobre una base blanca. FASCINANTES… ¡No podía dejar de mirarlos!

El Complejo Arqueológico “Fortaleza de Kuélap” o » Reino de los Chachapoyas» fue declarado Patrimonio Cultural de Perú en 1998 favoreciendo su protección y puesta en valor.

Esta cultura es sorprendente. Este viaje es MARAVILLOSO y sólo lo tiene Viajes Fama de la mano con los extraordinarios servicios de LATAM Airlines, quien abrió el vuelo a Jaén hace sólo algunos meses… ¡No te lo puedes perder!

Además, National Geographic lo ha puesto en los 50 lugares más espectaculares del mundo que debes visitar al menos una vez en la vida. ¡SÍ, aunque usted no lo crea!

Y estoy de acuerdo. Soy inmensamente feliz de haberlo conocido… Wow!!!

En Viajes Fama te atenderá Vicky Jiménez, una experta en Sudamérica.

Tel: (55) 5209 4000 .
www.viajesfama.com
www.latam.com


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