Te cuento una historia mágica
Perdón, julio es un mes súper importante para mí porque es cumpleaños del “niño que vivió” y, obvio, de su creadora J.K. Rowling. Por eso, los voy a llevar por un mágico recorrido por algunos lugares que, si eres fanático (o no) de la saga de Harry Potter, sin duda tienes que disfrutar…
Sigue los pasos de Harry Potter
La historia inició en el número 4 de Privet Drive, donde un niño mago vivía en una alacena debajo de la escalera. Esta mítica e importante casa donde Harry vivió durante largos años es real y la puedes encontrar en el número 12 de Picket Post Close en Berkshire. Puedes ir, pero la casa es privada, así que no interrumpas a los muggles.
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¿Quieres hacer un paréntesis en la visita y saber si hablas pársel como Harry lo descubrió? La escena de las serpientes fue grabada en el London Zoo. Por si quieres saber si compartes esa característica con el que no debe ser nombrado.
Una vez que recibimos la carta de Hogwarts, hay que ir por nuestros útiles escolares a Diagon Alley. Pero primero debemos sacar dinero del famoso banco para magos llamado Gringotts; un lugar que es en realidad la embajada de Australia en Reino Unido. Desafortunadamente, a menos que tengas una visa o vayas a realizar un trámite, no puedes ingresar pero vale la pena ¿no crees?
El famoso callejón fue recreado en Leadenhall Market, un mercado victoriano lleno de tiendas de delicatessen. Hay una sección llamada “Bull’s Head Passage”, donde encontrarás una tienda azul que se utilizó como entrada al Caldero Chorreante.
Si ya tienes todo listo, ¡vámonos a Hogwarts! La siguiente parada es la estación King Cross, donde buscarás el andén 9 ¾ y hay una pared donde podrás tomarte la foto con todo y baúl, varita y capa y recrear esa famosa escena de Harry Potter. También puedes llevar souvenirs en la tienda que está en la misma estación.
El Hogwarts Express tiene un largo recorrido para llegar a la escuela de magia y hechicería. ¿Recuerdas cuando Ron y Harry roban el Ford Anglia del señor Weasley y hacen peripecias alrededor del tren? Bueno, esas mágicas escenas fueron tomadas en el Viaducto de Glenfinnan, situado en la cima de Loch Siel, en las Tierras Altas del Oeste de Escocia. Disfruta tu viaje a ese lugar donde podrás ver a los trenes recorrer la vía.
Christ Church, Oxford University fue lo que motivó a J.K Rowling a crear el Gran Comedor. Si bien no son iguales, sí tienen varias similitudes que te recordarán esas escenas donde la comida no dejaba de aparecer o donde Harry recibió su primer escoba. ¿Te acuerdas?
Llegaste a Hogwarts en este recorrido, y si bien el castillo está inspirado en diferentes edificios y castillos y básicamente es una recreación de la mente de Rowling con muchísimos efectos especiales, varias de las escenas interiores se filmaron en el castillo de Northumberland, Inglaterra. Fue construido en 1096 y se usó para rodar los interiores de las películas del niño mago o esa escena donde Harry tiene su primer clase de vuelo. El área que rodea al castillo en realidad sí existe y está en Glencoe, al Norte de Escocia.
En la Sala Capitular de la Catedral de Durham se recreó la escena donde Harry y Ron llegan tarde a la clase de McGonagall. La universidad de Oxford también fue parte importante de diferentes escenas; por ejemplo la biblioteca o la enfermería donde a Harry le reconstruyen el brazo.
Los alumnos mayores tenían derecho a visitar Hogsmeade y disfrutar un paseo tranquilo por el lugar, comprar dulces o beber cerveza de mantequilla. Y la estación que vimos en las películas en realidad está en el pueblo de Goathland en North Yorkshire, es la misma estación donde llega el tren de Hogwarts.
Si te sientes muy valiente y quieres conocer el verdadero bosque prohibido, entonces visita Burnham Beeches, donde Harry y Ron huyeron de las arañas, tuvieron el encuentro con centauros y thestrals o donde Hermione ayuda a Ron en su desaparición. Esa escena donde Harry se hace amigo de Buckbeak, vuelan sobre un lago y donde a todos se nos pone la piel chinita y nos emocionamos, en realidad se filmó en el Virginia Water Lake en Surrey.
¿Te acuerdas cuando la obscuridad comienza a llegar al mundo muggle y los Death Eaters atacan un puente en la película número seis? Este puente es real, es el Millenium Bridge, sin duda un must dentro de tu visita mágica por Londres.
Después del ataque, Dumbledore se encuentra con Harry en una estación que tiene un café subterráneo. Este lugar también existe, es el Surbiton Railway Station.
Todo fan de Harry Potter sabe qué hay en el número 12 de Grimmauld Place. Sí, es la casa del padrino favorito de todos, Sirius Black, que además sirvió como cuartel general de la Orden del Fénix ¿Ya te acordaste? Este lugar está inspirado en Lincoln’s Inn Fields, la plaza pública más grande de Londres, pero al final las casas que aparecen en la película son las de Claremont Square. ¡Tienes que conocerlas!
Pasemos a algo serio y que marcó a todos en los libros y en las películas: la muerte de Dobby. Harry llega con sus amigos a la casa de Bill y Fleur y ahí entierran al elfo doméstico, esta cabaña fue construida sólo para la película en la playa de Freshwater West, y ahí es donde está la tumba de nuestro amigo.
¿Cuál es el must a visitar de un potterhead? ¡Godric’s Hollow! A pesar de que sabemos poco del lugar, lo que sí conocemos es que es donde Harry nació, donde pudo tener una vida con sus padres, breve pero la tuvo, donde apareció Voldemort y dio pie al inicio de siete inolvidables libros. Pues este lugar es real y lo encontré en el pueblo inglés de Lavenham, en Suffolk a una hora de Cambridge. La casa de los Potter es un cottage del siglo XIV y conocida como De Vere House.
Sin duda alguna, la saga del “niño que vivió” marcó a toda una generación y sigue significando algo importante para quienes se aventuran a conocer esta mágica historia. Yo recibí el primer libro a los 13 años, mi papá me lo regaló y hasta el día de hoy no hay día que me arrepienta de haberme adentrado en ese mundo de fantasía… y sobre todo, de haber conocido Inglaterra y perseguir los pasos de Harry Potter.
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