Nice, France.- El segundo aeropuerto más importante después de París es el de esta ciudad; mucha gente llega para viajar a diferentes áreas de la Costa Sur.

De Nice a Vence

Viajamos confortablemente rumbo a Vence. Esto es algo que descubrí de Francia: todo está cerca en auto en la Costa Azul y sus paisajes son increíbles, dignos de una acuarela.

Vence es un pueblo pequeño y pintoresco, como muchos de los que encontrarás en Francia, con una zona medieval en el centro. Es un must por su arquitectura, fuentes de la eterna juventud (tiene alrededor de 80), restaurantes y tiendas locales. Aquí nos hospedamos en el Hôtel Le Floréal.

Debes visitar la Iglesia de Nuestra Señora de la Natividad, la catedral más pequeña de Francia, que posee un auténtico mosaico donado por Chagall, estar frente a él es impresionante. Conoce también la capilla de Matisse, un lugar emblemático, íntimo y perfecto. El concepto de sus vitrales, colores, formas y arquitectura son una delicia al ojo humano. Disfrutar esta ciudad amurallada consiste en recorrer sus calles, admirar su arte, conocer galerías y comer en sus restaurantes.

Cagnes-sur-Mer

Aquí, exploramos el Castillo Grimaldi, con salas abovedadas y la donación de los cuadros de Suzy-Solidor, una modelo francesa retratada por 200 diferentes pintores como Bacon, Dufy, Picabia entre otros y cuyas pinturas te encantarán.

No pierdas oportunidad de conocer Château Le Cagnard en la misma zona, tuvimos una emblemática comida en este castillo que tiene una terraza con vista insuperable; además, su techo se abre para tener una velada perfecta al aire libre.

Visita obligada es el Museo Renoir, la casa donde el famoso pintor pasó sus últimos 12 años de vida. Encontrarás alrededor de 17 esculturas y pinturas, fotografías del artista y su familia, la habitación donde pintaba y elementos personales, como la silla donde se inspiraba y realizaba sus pinturas.

Nice (Niza)

Nuestro hogar en esta ciudad fue en el Splendid Hotel & Spa con una ubicación perfecta a metros de la playa y a unos pasos del centro de la ciudad. Niza es famosa para veranear como toda una celebridad, pero es más que una hermosa playa. Es un sitio portuario con barrios preciosos, historias antiguas, gente amable y comida exquisita.

Imprescindible es conocer el Palais Lascaris, museo y monumento al mismo tiempo y que fue residencia de la familia Lascaris-Vintimille. Encontrarás arte y música de los siglos XVII y XVIII como pinturas, tapices, muebles y objetos musicales de Antoine Gautier.

Amé el Museo Matisse en Arène de Cimiez. Para llegar cruzarás unas ruinas romanas que hacen interesante la caminata y un parque donde la gente está jugando el deporte tradicional, pétanque.

Después de dos noches en Niza, continuando con el recorrido visité una fábrica de perfumes y cosméticos que se encuentra en Éze, la Perfumería Fragonard factoría familiar fundada en 1926, que hoy en día posee almacenes en la Costa Sur y museos en París. Una vez terminado el recorrido, subimos las escaleras empedradas de la ciudad antigua a 427 metros de altura donde viajarás en el tiempo, perdiéndote entre sus callejones donde hay boutiques de artistas y restaurantes.

La caminata tiene su recompensa: un mirador con impactantes vistas hacia la Costa Azul y un hermoso jardín exótico con una colección de cactus y estatuas de Jean-Philippe Richard que le dan un toque único a la vista. Culminamos el día en Éze con un banquete en Le Nid d’Aigle y su magnífica vista al Mediterráneo.

Villefranche-sur-Mer

En este lugar nuestra casa fue el Hotel Welcome, cuya ubicación es perfecta ya que cruzando la calle está el puerto que puedes observar nostálgicamente desde las habitaciones. Este lugar es muy tranquilo, el patrón de callejones y colores terracota de las casas se repite y le dan al sitio un aire muy antiguo. Uno de sus atractivos es la Ciudadela, una fortaleza erigida en 1557 para proteger la ciudad de ataques por mar, en ella se pueden realizar diversos eventos sociales. Casi enfrente del hotel está la Capilla de San Pedro decorada por Jean Cocteau en 1957, con escenas de la vida del patrón de los pescadores. La cena fue en La Mère Germaine, a lado del hotel y un restaurante ampliamente recomendado para disfrutar diferentes platillos franceses que te dejarán sin aliento, uno de mis favoritos.

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