Autoridades capitalinas instruyeron a los establecimientos que puedan representar lugares de congregación y contagio del COVID-19 a cerrar temporalmente. Entre estos, se encuentran importantes hoteles. El reporte semanal de la Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles informa que Ciudad de México y Cancún son los destinos más afectados.

En tanto, Braulio Arsuaga, presidente del Consejo Nacional Empresarial Turístico, informó en entrevista con Radio Fórmula que se le ha preguntado sobre si podrían ofrecer apoyo durante esta contingencia: “Nos decía que si estábamos dispuestos a dar hoteles para pacientes que no quepan en los hospitales. Dijimos que sí, que por supuesto hay voluntad y ganas de convertir espacios, no en hospital pero sí en algún refugio”.

Notimex compartió que, actualmente, la ocupación hotelera en destinos como Isla Mujeres, Cancún y Acapulco oscila entre el 2 y el 6 %, representando un dramático descenso. Por otra parte, son Matamoros y Huajuapan de León, en Oaxaca, las ciudades con más demanda (20 y 30 % respectivamente).

Ante esta situación, el sector hotelero reiteró su compromiso de atender las solicitudes gubernamentales para cuidar la salud de los mexicanos, pero exigió también claridad en las medidas de apoyo del gobierno federal para poder hacer frente a la presente crisis y así proteger a los más de 200 mil puestos de trabajo generados por este sector.

Otros negocios que también deberán seguir medidas muy especificas son restaurantes, fábricas, talleres, cárceles, oficinas, escuelas, dormitorios, habitaciones colectivas, centros de espectáculos y deportivos, según la Gaceta Oficial de la Ciudad de México.